Una manera de olvidarte

A diario busco razones para olvidarte,
trato de inventar ideas para no pensarte,
descubro excusas para no imaginarte,
leo sentimientos para no pensarte,
pero cada cosa me hace siempre recordarte.

¿Cómo hago para que salgas de mi mente
si te regale la llave y nunca me la devolviste,
si cada cosa que tiene tu nombre lleva mi sonrisa,
si cada momento del tiempo lleva tu lindo recuerdo?

Si no me falla la memoria hoy también te acabo de pensar,
si no me falla el corazón hoy también te acabo de recordar,
si no me falla la razón hoy también te acabo de olvidar,
si no me falla el amor hoy también te acabo de volver a amar.

Han pasado un par de días pesados,
miles de recuerdos que me hacen volver a caer,
muchas cosas que solo en mi mente puedo volver a ver,
y aun me pregunto si esto fue como la última vez.

Tengo la cabeza vacía de motivación,
porque todo lo que tenía te lo di sin meditación,
no me queda nada más en la imaginación,
porque tú eras mi única inspiración.

Pasar los días y pensar,
recordarte y volverte a olvidar,
imaginarte y volverme a despertar,
soñar con buscarte y no mirarte nunca más.

Hoy tengo una única manera de olvidar,
y es la misma que  un día me diste para continuar,
la única que aprendí cuando sonreíste,
que no quiero borrar de mi por miedo a lo que te arrepentiste.

Me despido de ti como las últimas veces,
me rehusó a olvidar pero si a dejar de pensarte,
me alejo con el afán de un día volver a encontrarte,
y soñando en Dios que nunca dejes de alegrarte.

Una manera de olvidarte, mil formas de recordarte.