no muchas veces se sonríe como se desea,
no en muchas oportunidades se goza
del placer de la alegría,
no siempre se está como se anhela.
Hoy he pensado, razonado y sufrido
la escaza razón que la vida me dio
para pensar, el dilema que
en un momento me hizo cavilar
y la cruda realidad que hoy me hace pasar.
Hoy no se que pienso,
no sé cómo debo actuar,
me cuesta tanto reaccionar,
me es difícil reflexionar,
pero sobretodo se me hace
complicado razonar.
Hoy vuelvo a tener una
razón más para estar mal,
otra excusa que darle
a la vida para renegar,
y no creo tener otra
oportunidad para fallar.
Hoy creo entender que la vida
me está enseñando algo,
me está dando el significado
de elegir el destino,
de formar una razón,
y de tomar la mejor decisión,
hoy, es el destino,
quien me enseño lo que
duele tener la razón.
Hoy vuelvo a tener una
prueba de la vida,
tanto así que me clausuro
las ganas de sonreír,
me cerró el deseo de ser feliz,
me lleno de ceros la idea
positiva que tenía en mi mente,
y me derrochó el absurdo
pensamiento que me quedaba.
Ahora solo me queda
huir, de no ver ni las sombras,
de pensar que fue un sueño
o una pesadilla,
de despertar de esta horrible
y cruda realidad.
